jueves, 26 de abril de 2007

HISTORIA DE CÁDIZ: EL TEMPLO

Kronos, Astarté y Melqart


(...)En el mundo antiguo era muy importante el aspecto religioso y según Plinio en la isla mayor se hallaban tres templos o santuarios: el de Kronos (Saturno), Astarté (Venus) y el de Melqart (Hércules). Plinio situó el santuario de Kronos frente al de Astarté. Con todo esto, los investigadores se han afanado en buscar el lugar exacto donde pudieron haber sido levantados cada uno de ellos y en base a los diferentes hallazgos encontrados, se piensa que el de Kronos pudo hubicarse en las inmediaciones del Castillo de San Sebastián, el de Astarté en el de Santa Catalina (la ubicación de ambos no difiere de las indicaciones de Plinio) y el Melqart en la isla de Sancti Petri..

Los restos encontrados en las inmediaciones del actual castillo de San Sebastián son predominantemente religiosos al igual que los hallados en las inmediaciones de la Punta del Nao; junto al castillo de Santa Catalina. Aquí se registraron objetos como quemaperfumes, el Gran Thymiaterion (fechado en los siglos VII-VI a.C), objetos votivos como estatuillas de terracota o el capitel protoeólico de volutas, hallado en 1959, por un subalterno del museo gaditano cuando se encontraba mariscando en la Caleta por las inmediaciones de dicha zona. Todo esto reforzó esta hipótesis sobre todo, si tenemos en cuenta los capiteles documentados en templos Tirios los cuales reúnen las mismas características que el que acabo de comentar. Por la forma del ejemplar, se cree que no pudo servir como elemento constructivo funcional sobre el que descansara peso alguno sino mas bien, se piensa que pudo pertenecer a dicho santuario pero como columna exenta con claros fines estéticos o decorativos. El Templo más importante de los tres y sobre el que mas se ha escrito es el dedicado a Melqart, un dios Tirio protector y benefactor de la ciudad, de la navegación y garante del comercio el cual, se encontraría en la isla de Sancti Petri. Un hallazgo en sus inmediaciones en concreto, posee una inscripción “HG” el cual se ha interpretado como “Hércules Gaditano”. De ser así, parece que no hay duda. Además esto se ve reforzado si tenemos en cuenta el marcado carácter mercantil y comercial de esta sociedad. El Templo era el elemento que financiaba la actividad colonizadora asesorando a los colonos a cambio de un diezmo anual. Su famoso oráculo fue consultado por personajes importantes de la talla de Aníbal, César o Polibio. El Heracleion gaditano debía ser muy rico y en consecuencia diversas veces expoliado. El mismo César, tras la Batalla de Munda lo expolió robando las estatuas pertenecientes al Templo.

Extractos del artículo publicado en la revista Ubi Sunt? nº 20 de 2006