El origen del actual Museo de Cádiz se inicia con la Desamortización de Mendizábal en 1835 y el depósito en la Academia de Bellas Artes de la ciudad de una serie de pinturas procedentes de diversos conventos exclaustrados. Entre estas obras se encontraba la serie de Zurbarán procedente de la Cartuja de Jerez de la Frontera. Mientras, en torno a la Academia de Bellas Artes, a lo largo del siglo XIX, se fue aglutinando un núcleo de obras de la floreciente escuela de pintura gaditana, con los ecos finales del neoclasicismo, el romanticismo, el costumbrismo y el cuadro de historia.
El hallazgo casual en 1887 del sarcófago antropoide fenicio masculino en los terrenos de los Astilleros de Cádiz fue el punto de arranque de la colección arqueológica, lo que justificó la creación de un museo de esta naturaleza en la ciudad, que fue nutriéndose de los hallazgos de las propias excavaciones arqueológicas de aquellos momentos, donaciones de particulares y de los objetos que había reunido la Comisión Provincial de Monumentos Histórico Artísticos, creada a tal efecto por la legislación elaborada por los diferentes gobiernos liberales desde el reinado de Isabel II, tras la Revolución Gloriosa de 1868.
El Museo ha conocido varias sedes a lo largo del tiempo, como el Callejón del Tinte o el Paseo de Canalejas, y se estableció definitivamente en el edificio de la Plaza de Mina en 1935, ocupando sólo la planta baja y compartiendo sede con la Academia de Bellas Artes. No obstante, el Arqueológico y el Bellas Artes se constituyen en museos separados, con directores y personal diferentes.
No será hasta 1970 cuando se fusionen ambas instituciones en el actual Museo de Cádiz, incluyéndose también una Sección de Etnografía. A partir de 1980 se inicia una profunda reforma en el edificio a cargo del arquitecto Javier Feduchi. Se han realizado ya dos fases de este Plan Director estando pendiente una tercera.
El hallazgo casual en 1887 del sarcófago antropoide fenicio masculino en los terrenos de los Astilleros de Cádiz fue el punto de arranque de la colección arqueológica, lo que justificó la creación de un museo de esta naturaleza en la ciudad, que fue nutriéndose de los hallazgos de las propias excavaciones arqueológicas de aquellos momentos, donaciones de particulares y de los objetos que había reunido la Comisión Provincial de Monumentos Histórico Artísticos, creada a tal efecto por la legislación elaborada por los diferentes gobiernos liberales desde el reinado de Isabel II, tras la Revolución Gloriosa de 1868.
El Museo ha conocido varias sedes a lo largo del tiempo, como el Callejón del Tinte o el Paseo de Canalejas, y se estableció definitivamente en el edificio de la Plaza de Mina en 1935, ocupando sólo la planta baja y compartiendo sede con la Academia de Bellas Artes. No obstante, el Arqueológico y el Bellas Artes se constituyen en museos separados, con directores y personal diferentes.
No será hasta 1970 cuando se fusionen ambas instituciones en el actual Museo de Cádiz, incluyéndose también una Sección de Etnografía. A partir de 1980 se inicia una profunda reforma en el edificio a cargo del arquitecto Javier Feduchi. Se han realizado ya dos fases de este Plan Director estando pendiente una tercera.
Sección de Arqueología- Comprende un total de ocho salas, que permiten efectuar un recorrido por la prehistoria, antigüedad y medievo de la actual provincia de Cádiz. Se puede efectuar una visita puramente cronológica, pero también es posible dirigirse hacia las diferentes colecciones en las que el Museo de Cádiz destaca por su singularidad, como las de época fenicia o romana. Por último, respecto a las visitas temáticas, son muchos los itinerarios que se proponen, dada la riqueza de las colecciones del museo, aunque algunos son especialmente interesantes.La Arqueología y el mar. Desde la reproducción de las pinturas de Laja Alta, que ilustran la llegada de una flotilla fenicia, las relaciones de Gadir con Cerdeña, la navegación en la bahía de Cádiz y en el Lago Ligustino, hasta el comercio marítimo, a través de las ánforas y los cargamentos de naves romanas, compendio de la riqueza de Gades. La muerte a través de la arqueología. Recorrido desde la prehistoria, con los primeros enterramientos neolíticos, para seguir luego con los rituales fenicios, romanos y paleocristianos.El adorno personal. Desde los objetos prehistóricos encontrados hasta la colección de joyas fenicias de la necrópolis de Cádiz o los materiales de cuidado personal de época romana. Los emperadores romanos. Itinerario por la historia de Roma a través de los retratos, monedas e inscripciones imperiales, desde Julio César hasta los tiempos de decadencia romana.Los dioses y los héroes. Bella ruta desde Oriente a Occidente, pasando por Chipre, las islas griegas y Sicilia, hasta la mítica Gadir/ Gades, junto al mito de Gerión, Melqart, Hércules.
Sección de Bellas Artes- El recorrido cronológico por esta sección del museo se realiza a través de ocho salas de exposición que abarcan la pintura de los siglos XVI al XX. La estructuración está realizada de acuerdo con la cronología de épocas y siglos, así como en función de la cantidad y calidad de las obras que integran las colecciones. Existe una sala para las obras del siglo XVI; tres, para el Barroco, con obras de Zurbarán, Murillo, Alonso Cano y otras escuelas españolas; una sala para el Barroco europeo; dos, para el siglo XIX; y dos salas para el siglo XX.Las salas del siglo XIX están dedicadas a la pintura de historia y la pintura costumbrista, representadas por autores andaluces como García Ramos, Gonzalo Bilbao, Francisco Godoy, Rodríguez Barcaza y Salvador Viniegra.Ante la diversidad de tendencias y estilos que ofrece el siglo XX se ha dividido la colección en dos épocas cronológicas, primera y segunda mitad del siglo. La primera mitad está representada por autores españoles como Beruete, Sorolla, Abarzuza o Zuloaga. En la Sala VIII, inaugurada por la Consejera de Cultura en enero de 1998, y denominada de Arte Contemporáneo, se integraron las obras pertenecientes a los últimos cincuenta años, entre las que se encuentran expuestas las últimas adquisiciones realizadas por la Consejería de Cultura, como son las obras de Rafael Alberti, Guillermo Pérez Villalta y Chema Cobo, así como un Miró, cedido por Dñª Carmen Romero y tres obras de Costus, cedidas por la familia de estos artistas o por los propios autores. Esta sala, ubicada en la segunda planta del edificio, permite contemplar a vista de pájaro las exposiciones temporales que se instalan en el patio central, e integrar visualmente las salas de las otras plantas y la que está dedicada a la obra de Zurbarán, pudiendo así realizar un virtual y diacrónico recorrido en el tiempo.
Sección de Etnografía- La visita monográfica a esta sección está centrada en los títeres de la Tía Norica, ofreciendo la posibilidad de recrear este espectáculo callejero tradicional de Cádiz. Tanto el argumento como los personajes repiten una serie de prototipos clásicos: la vieja gruñona, el sobrino espabilado, el médico ininteligible. Ello viene a dar vida a unos títeres que no han dejado de perder actualidad en un mundo como el de hoy, donde la diversión de los más pequeños está totalmente mediatizada por la tecnología y los efectos especiales.
Dirección: Plaza de Mina, s/n.11004 Cádiz
Teléfonos: Dirección-Administración: 956 20 33 68 / 956 20 33 77 Difusión y Reserva de Grupos: 956 20 33 71 Fax: 956 20 33 81
Director: Juan Alonso de la Sierra
Horarios: Lunes: cerrado. Martes: de 14,30 a 20,30 horas. Miércoles a sábado de 9,00 a 20,30 horas. Domingos: de 9,00 a 14,30 horas. Festivos abiertos: de 9,00 a 14,30 horas
Entrada: Unión Europea: gratuita, acreditando nacionalidad. Otros Países: 1,50 €.
(Información tomada de la página : http://www.juntadeandalucia.es/cultura/museos/MCA/?lng=es)